¿Qué es el trapillo?
El trapillo es un nuevo tipo de material que se utiliza para hacer crochet, se trata de tiras de tela, erolladas y presentadas en madejas. Su origen se debe, en parte, al auge del reciclaje y la reutilización de materiales. Se empezó cortando tiras de camisetas y prendas semejantes para hacer madejas que luego se reutilizarían para realizar objetos dándoles un nuevo uso a estas prendas usadas. Esto fue todo un boom en Internet y hoy día hay madejas en muchísimas tiendas especializadas y mercerías. Gracias a su distribución comercial, contamos con madejas de motivos y estampados muy diversos. Lo cual nos da un sinfín de posibilidades a la hora de trabajarlo y crear.
En inglés, se utliza el nombre en español Trapillo, aunque también usan otras denominaciones como T-shirt yarn (que significa lieteralmente hilo de camiseta) o Crochet XL/XXL.
Para tejer con trapillo usamos una aguja de crochet grande, mucho más grande de las que usamos para hacer amigurumi. A modo indicativo, yo utilizo agujas de 8 y 10mm. Debido a las características de este material y al uso de una aguja grande, hay cosas que hacemos con hilo o lana que no podremos hacer con trapillo o al menos no quedarían bien. Por ejemplo, un amigurumi pequeño o una bufanda.
Este tipo de material suele utilizarse para muchas cosas, entre ellas destacamos los objetos para el hogar (alfombras, cestas, posavasos…) y los accesorios o joyería (bolsos, collares, monederos…). Sin embargo, no solo podemos utilizarla para hacer crochet, sino que se emplea en otras técnicas manuales como el macramé y el punto.
Los princicpiantes en el mundillo del crochet encontrarán muy gratificante aprender a tejer con trapillo, ya que se trabaja rápido y al ser un material grueso se ve mucho mejor y más claro cómo hacer los distintos puntos. También es un factor importante para el principiante el ver su labor terminada con prontitud, ya que esto da ánimos para seguir crocheteando nuevos proyectos. Sin embargo, si se empieza con proyectos largos y complejos, normalmente nos acabaremos rindiendo y se nos quitarán las ganas de seguir.
Los puntos que realizaremos son los mismos que los que os expliqué en la sección de crochet, por lo que no los voy a repetir en esta entrada. Si queréis echarle un vistazo a los puntos básicos de crochet los podéis encontrar aquí.
Yo empecé a usar trapillo mucho después de empezar con el crochet y de hecho he realizado muchísimos menos proyectos de trapillo que de amigurumi. Digamos que lo que más me gusta del crochet es hacer muñecos, por lo que será la sección con más patrones.
De todas formas, sí que he hecho algunas cestas y pulseras con trapillo. Lo que tengo muchas ganas de hacer son bolsos, he visto patrones perfectos para el verano que seguramente haga este año. Los iré compartiendo con vosotros en esta sección que espero que vaya creciendo muy pronto.
Creo que lo mejor de este material es que permite hacer cosas distintas a las que normalmente haríamos con hilo o lana y además es un método de reciclaje que nos permite reautilizar para crear nuevas cosas de utilidad o de adorno.
Tipos de trapillo
Trapillo fino: es aquel que mide 1cm o menos y es el que usamos para proyectos de punto y para bolsos y carteras de mano. Hay que utilizar un material fino para que el tejido no sea demasiado pesado de llevar. No se recomienda el uso de trapillo grueso para hacer bolsos, ya que si hacemos un bolso que pesa ya vacío imagina lo que pesará al meter nuestros objetos personales. Además los puntos no quedan tan bonitos en un bolso si están hechos con hebras muy gruesas. El trapillo fino resulta útil también para la elaboración de muñecas, pulseras y collares. Puedes usarlo también para cestas pequeñas, pero tienes que apretar el punto para este tipo de proyectos. Al pretar los puntos bien, tu cesta tendrá unos laterales fuertes y rígidos y no se deformará tan fácilmente. Lo que también puedes hacer es usar dos madejas a la vez para que tenga más consistencia para proyectos como alfombras o cestas más grandes. Dará contraste de color a tus proyectos.
Trapillo grueso (1,5 – 2.0 cm o más) suele utilizarse más para hacer alfombras y cestas. Tus labores tendrán una rigidez y un cuerpo que no lo conseguirás con materiales más finos. Las alfombras también suelen sser más fuertes, por lo que este tipo de trapillo es el mejor. Aún así, puedes jugar con los grosores haciendo vueltas con trapillo fino y otras con otro más grueso. Por ejemplo, puedes dar un toque de color con trapillo fino de un color llamativo para que contraste con vueltas de colores más apagados. Las combinaciones son infinitas.
Otros proyectos interesantes
- Puffs.
- Macetas colgantes.
- Cestas para maquillaje.
- Manteles individuales para comer.
- Muñecos.